El jefe comunal sanisidrense, Gustavo Posse, fue reelecto intendente de San Isidro tras lograr el 48 por ciento de los votos.
En medio de los festejos, pasadas las 21 y con los datos obtenidos de las mesas escrutadas, Posse afirmó, emocionado: “Siento una gran alegría y una enorme responsabilidad por haber recibido nuevamente la confianza de los sanisidrenses. Tenemos que seguir trabajando, como lo venimos haciendo, para que San Isidro esté cada vez mejor”.
Y remarcó: “Es una alegría inmensa haber ganado en todas las localidades: San Isidro, Acassuso, Beccar, Martínez, Villa Adelina y Boulogne que muestra un gran respaldo a las obras y los servicios que llevamos a los vecinos”.
“Hemos hecho muchísimo pero nunca es suficiente cuando hablamos de mejorar la calidad de vida de los vecinos. Por eso, vivo este nuevo periodo con el entusiasmo y las ganas, como si fuera la primera vez”, aseguró.
En referencia a los resultados de las elecciones a nivel provincial y nacional, Posse comentó: “Es una verdadera pena que los bonaerenses se pierdan a una gobernadora como Vidal. Ahora lo importante es seguir trabajando y buscar consensos para que lograr el objetivo común: el bienestar de los argentinos.
En segundo lugar, se ubicaba el Frente de Todos a 22 puntos de distancia del Frente Cambiemos San Isidro, que encabeza Gustavo Posse.
lunes, 28 de octubre de 2019
miércoles, 23 de octubre de 2019
MARTÍNEZ CELEBRA SU 38° ANIVERSARIO CON UN PICNIC PARA TODA LA FAMILIA
Martínez cumple 38 años y lo celebra, como ya es costumbre, con una fiesta para toda la familia. Talleres de arte, música en vivo, shows infantiles, gastronomía y un cierre a puro baile con el grupo Industria Nacional, formarán parte de la celebración gratuita que se llevará a cabo el domingo 3 de noviembre, desde las 13:00, en la Plaza 9 de Julio, ubicada en Monseñor Larumbe y Necochea
“Como todos los años, la cita será en esta plaza centenaria, totalmente remodelada y epicentro de una localidad que es fruto del trabajo de sus vecinos y supo consolidar sus pujantes centros comerciales en armonía con los barrios residenciales. Todo un ejemplo cuando pensamos en ciudades modernas”, expresó Gustavo Posse, intendente de San Isidro.
“Será una fiesta de y para los vecinos de Martínez, con muchísima presencia de artistas locales, profesores de la Casa de Cultura del barrio que se pondrán al frente de los talleres y emprendedores gastronómicos, también de la zona, que cocinarán rico para redondear un encuentro comunitario y en el espacio público que todos estamos esperando con entusiasmo”, expresó Eleonora Jaureguiberry, subsecretaria general de Cultura de San Isidro.
Con la conducción desde el micrófono del también vecino Lionel Campoy, será una fiesta para llegar temprano, al mediodía, tomar asiento, entregarse a la gastronomía y dejarse llevar por una programación de jornada completa y para toda la familia. A las 19:00, el cierre, con Industria Nacional, uno de los pioneros del beat melódico nacional, allá por el 69, y sus clásicos La tarde que te amé, Un día de paseo en Santa Fe y Guatemala, que chica tan mala, entre otros.
Si bien los más chicos tendrán diversión asegurada durante toda la tarde, hay que tener en cuenta un horario, las 15:00, cuando suban al escenario Los Cazurros con su show Súperhits. Un compilado con los momentos más divertidos y desopilantes del carismático dúo, con 25 años de exitosísima carrera. De Historia de Terror y Caperucita Roja a la Gallega a Monstruos de La Mueetee, que convertirán a la plaza en un gran cuarto de juegos.
Luego, a las 17:00, más arte local con una banda de pop rock y en franco ascenso, Proyecto Esencial, que llega con cuatro CDs, como Melatonin, producido en Inglaterra por James Loughrey, el mismo que trabajó con Depeche Mode, y La noche más larga (2017), cuyo tema La Canción Desesperada formó la playlist Indie Argentina. En doble turno, a las 16:00 y a las 17:50, el anfiteatro se calentará con ritmos latinos, de la salsa a la bachata, y de la mano de un experto, el profesor cubano Wilson Pérez, profesor de la Casa de Cultura de Martínez Centro, al que habrá que seguirle el ritmo.
Debajo del escenario, la acción comenzará temprano, a las 13:00, con partidas simultáneas de ajedrez. Una buena opción para entrar en materia, ya que a las 14:30 la Escuela Municipal de Ajedrez, coordinada por el Maestro Internacional Rodolfo Garbarino, desplegará sobre el piso del anfiteatro un tablero enorme para recrear una partida histórica con peones, alfiles y torres vivientes, sumado a una camilla para llevarse a los caídos.
Para poner manos y mente en acción, talleres y más talleres, gratis, de 14:00 a 18:00 y con los docentes de la Casa de Cultura de Martínez y de Acassuso listos para acompañar y guiar, desde Espacio de Arte navideño, Mosaiquismo con papel y Cerámica hasta Historietas, Pátinas y Pintura sobre objeto. Con materiales incluidos, el único requisito será ganas de ser parte. Además, maquillaje artístico para andar por la plaza con la cara renovada y una muestra de los talleres de tejido y arte de la Fundación Iluminando desde el Faro.
Una plaza en total estado de ebullición cultural y literalmente tomada de rincón a rincón que tendrá mesas debajo de los árboles para el alto y probar cosas ricas de los gastronómicos locales. Y un cierre con los industria nacional Pedro Markowicz, Mario Cukier y Mito Ramisch. Un show más allá de las edades que tendrá, como adelantó el trío, canciones del CD doble Industria Nacional-Grandes Éxitos, que incluye sus hits y los de otras bandas, como Estoy hecho un demonio, Tiritando, Negra no te vayas de mi lado y Ven que yo te quiero ver bailar.
PROGRAMACIÓN 2019
- Escenario
14.30 hs. Ajedrez viviente a cargo de Rodolfo Garbarino, coordinador de la Escuela Municipal de Ajedrez.
15 hs. Los Cazurros “Súperhits”, espectáculo infantil.
16 hs. Salsa y ritmos latinos con Wilson Pérez, profesor de la Casa de Cultura de Martínez Centro.
17 hs. Proyecto Esencial, banda local de pop rock.
17.50 hs. Salsa y ritmos latinos con Wilson Pérez, profesor de la Casa de Cultura de Martínez Centro.
19 hs. Industria Nacional, banda musical de los años ´70.
TALLERES DE LAS CASAS DE CULTURA DE MARTÍNEZ Y ACASSUSO
De 14 a 18 hs. Gratis, incluye materiales. Cupos limitados e inscripción previa en cada taller.
Espacio de Arte navideño para toda la familia. Coordinan Adriana Méndez y Mónica Rodríguez.
Mosaiquismo con papel para toda la familia. Prof. Carina Valiente.
Cerámica para niños. Prof. Guillermo Bruno.
Historietas para niños. Prof. Mario Medero.
Pátinas para adultos. Prof. Cecilia Magliano.
Pintura sobre objeto para adultos. Prof. Lilian Bonaguro.
ADEMÁS
De 13 a 14.30 hs. Partidas simultáneas de ajedrez.
De 13 a 20 hs. Gastronomía local.
De 14 a 18 hs. Maquillaje artístico a cargo de Verónica Abreu.
De 13 a 18 hs. Muestra de los talleres de tejido y arte de la Fundación Iluminando desde el Faro.
GASTRONOMÍA
Blancanieves, El Mundo de la Pizza, Frida, Violeta y Yo, La Plaza Helados, Leny San Sushi, El Candado, Cooperadora de la Escuela N° 9, Bar Don Martín, La Elbita y la Parroquia Santa Teresita del Niño Jesús (los confirmados hasta el momento).
La actividad se suspende por lluvia.
“Como todos los años, la cita será en esta plaza centenaria, totalmente remodelada y epicentro de una localidad que es fruto del trabajo de sus vecinos y supo consolidar sus pujantes centros comerciales en armonía con los barrios residenciales. Todo un ejemplo cuando pensamos en ciudades modernas”, expresó Gustavo Posse, intendente de San Isidro.
“Será una fiesta de y para los vecinos de Martínez, con muchísima presencia de artistas locales, profesores de la Casa de Cultura del barrio que se pondrán al frente de los talleres y emprendedores gastronómicos, también de la zona, que cocinarán rico para redondear un encuentro comunitario y en el espacio público que todos estamos esperando con entusiasmo”, expresó Eleonora Jaureguiberry, subsecretaria general de Cultura de San Isidro.
Con la conducción desde el micrófono del también vecino Lionel Campoy, será una fiesta para llegar temprano, al mediodía, tomar asiento, entregarse a la gastronomía y dejarse llevar por una programación de jornada completa y para toda la familia. A las 19:00, el cierre, con Industria Nacional, uno de los pioneros del beat melódico nacional, allá por el 69, y sus clásicos La tarde que te amé, Un día de paseo en Santa Fe y Guatemala, que chica tan mala, entre otros.
Si bien los más chicos tendrán diversión asegurada durante toda la tarde, hay que tener en cuenta un horario, las 15:00, cuando suban al escenario Los Cazurros con su show Súperhits. Un compilado con los momentos más divertidos y desopilantes del carismático dúo, con 25 años de exitosísima carrera. De Historia de Terror y Caperucita Roja a la Gallega a Monstruos de La Mueetee, que convertirán a la plaza en un gran cuarto de juegos.
Luego, a las 17:00, más arte local con una banda de pop rock y en franco ascenso, Proyecto Esencial, que llega con cuatro CDs, como Melatonin, producido en Inglaterra por James Loughrey, el mismo que trabajó con Depeche Mode, y La noche más larga (2017), cuyo tema La Canción Desesperada formó la playlist Indie Argentina. En doble turno, a las 16:00 y a las 17:50, el anfiteatro se calentará con ritmos latinos, de la salsa a la bachata, y de la mano de un experto, el profesor cubano Wilson Pérez, profesor de la Casa de Cultura de Martínez Centro, al que habrá que seguirle el ritmo.
Debajo del escenario, la acción comenzará temprano, a las 13:00, con partidas simultáneas de ajedrez. Una buena opción para entrar en materia, ya que a las 14:30 la Escuela Municipal de Ajedrez, coordinada por el Maestro Internacional Rodolfo Garbarino, desplegará sobre el piso del anfiteatro un tablero enorme para recrear una partida histórica con peones, alfiles y torres vivientes, sumado a una camilla para llevarse a los caídos.
Para poner manos y mente en acción, talleres y más talleres, gratis, de 14:00 a 18:00 y con los docentes de la Casa de Cultura de Martínez y de Acassuso listos para acompañar y guiar, desde Espacio de Arte navideño, Mosaiquismo con papel y Cerámica hasta Historietas, Pátinas y Pintura sobre objeto. Con materiales incluidos, el único requisito será ganas de ser parte. Además, maquillaje artístico para andar por la plaza con la cara renovada y una muestra de los talleres de tejido y arte de la Fundación Iluminando desde el Faro.
Una plaza en total estado de ebullición cultural y literalmente tomada de rincón a rincón que tendrá mesas debajo de los árboles para el alto y probar cosas ricas de los gastronómicos locales. Y un cierre con los industria nacional Pedro Markowicz, Mario Cukier y Mito Ramisch. Un show más allá de las edades que tendrá, como adelantó el trío, canciones del CD doble Industria Nacional-Grandes Éxitos, que incluye sus hits y los de otras bandas, como Estoy hecho un demonio, Tiritando, Negra no te vayas de mi lado y Ven que yo te quiero ver bailar.
PROGRAMACIÓN 2019
- Escenario
14.30 hs. Ajedrez viviente a cargo de Rodolfo Garbarino, coordinador de la Escuela Municipal de Ajedrez.
15 hs. Los Cazurros “Súperhits”, espectáculo infantil.
16 hs. Salsa y ritmos latinos con Wilson Pérez, profesor de la Casa de Cultura de Martínez Centro.
17 hs. Proyecto Esencial, banda local de pop rock.
17.50 hs. Salsa y ritmos latinos con Wilson Pérez, profesor de la Casa de Cultura de Martínez Centro.
19 hs. Industria Nacional, banda musical de los años ´70.
TALLERES DE LAS CASAS DE CULTURA DE MARTÍNEZ Y ACASSUSO
De 14 a 18 hs. Gratis, incluye materiales. Cupos limitados e inscripción previa en cada taller.
Espacio de Arte navideño para toda la familia. Coordinan Adriana Méndez y Mónica Rodríguez.
Mosaiquismo con papel para toda la familia. Prof. Carina Valiente.
Cerámica para niños. Prof. Guillermo Bruno.
Historietas para niños. Prof. Mario Medero.
Pátinas para adultos. Prof. Cecilia Magliano.
Pintura sobre objeto para adultos. Prof. Lilian Bonaguro.
ADEMÁS
De 13 a 14.30 hs. Partidas simultáneas de ajedrez.
De 13 a 20 hs. Gastronomía local.
De 14 a 18 hs. Maquillaje artístico a cargo de Verónica Abreu.
De 13 a 18 hs. Muestra de los talleres de tejido y arte de la Fundación Iluminando desde el Faro.
GASTRONOMÍA
Blancanieves, El Mundo de la Pizza, Frida, Violeta y Yo, La Plaza Helados, Leny San Sushi, El Candado, Cooperadora de la Escuela N° 9, Bar Don Martín, La Elbita y la Parroquia Santa Teresita del Niño Jesús (los confirmados hasta el momento).
La actividad se suspende por lluvia.
domingo, 6 de octubre de 2019
“Bendito sea Dios que me permitió encontrarte”
Durante el 9 y 10 de junio, los ataques ingleses sobre las posiciones argentinas habían recrudecido. El 11 de junio el fuego británico barría la ladera del Monte Harriet, defendido por 390 hombres, la mayoría del Regimiento de Infantería 4. El enemigo disponía de una superioridad de cuatro a uno.
Parapetado en una de las rocas estaba el cabo enfermero Héctor Pereyra, de 18 años. Unos meses antes el joven cursaba en la Escuela de Suboficiales General Lemos los estudios de su especialidad. Una vez conocida la recuperación de las islas, el 2 de abril de 1982, le dieron las jinetas de cabo y lo asignaron a la Compañía Comando y Servicio perteneciente a la III Brigada de Infantería. El 25 de abril ya estaba en Malvinas.
Durante cinco días, permaneció junto a su unidad en el aeropuerto. Luego, hasta el 11 de mayo, ocupó posiciones en un viejo puerto. Los tremendos bombardeos que los ingleses efectuaron el 1 de mayo, lo enfrentó por primera vez a la sangre que se derrama en una guerra: tuvo que asistir a sus compañeros heridos.
Hoy, 37 años después y desde Gualeguaychú, donde reside, Héctor recuerda aquellos días frente a Infobae: “El 11 de mayo dividieron a la compañía en dos: una parte iría a Puerto Howard y la otra a Monte Kent".
Las batallas ya eran cruentas, y luego de la caída de Pradera del Ganso, Pereyra revela que "quedamos un poco solos, ya que todos se replegaban en dirección a Puerto Argentino. Nosotros lo hicimos hacia Monte Harriet”.
Y es donde comenzó esta historia.
Ataque al Monte Harriet
El 12 de junio, Monte Harriet era un verdadero infierno. Los ingleses avanzaban en el terreno escarpado de la ladera, tenazmente defendida por los argentinos. En una de las trincheras, se encontraba Héctor Pereyra.
Uno de los británicos que participaba del ataque era Andy Damstag. “Encontramos una feroz resistencia de las posiciones argentinas; sus ametralladoras de 50 mm no dejaban de disparar con mucha puntería. Nuestro avance se vio obstaculizado aún más por el fuego de armas de menor calibre”, relata a Infobae desde su casa en Bolton, Reino Unido.
Damstag, con sus 18 años, se había enlistado en los Royal Marines ni bien terminó sus estudios secundarios, a los 16. Fue a la guerra como uno de los miembros del equipo de armas anti tanque. Integraba la Compañía Lima de los 42º Commando de los Royals Marines. Sólo tenía una vaga idea de dónde quedaban las islas, y cuando desembarcó el paisaje le hizo recordar a Dartmoor, una localidad en Devon, donde su unidad tenía su base y dónde se había entrenado.
A dos horas de iniciada la batalla, las secciones de avanzada británicas estaban inmovilizadas a pocos metros de las trincheras argentinas. Damstag remarca que “estábamos lo suficientemente cerca como para que ambos bandos pudiésemos lanzar granadas”.
Los británicos decidieron neutralizar la resistencia argentina disparando un proyectil anti tanque contra las trincheras que tenían enfrente, a escasos 30 metros.
Un explosivo cayó en la posición que Pereyra ocupaba con el cabo Carlos López. Pereyra fue gravemente herido: fractura de tibia y peroné, heridas en la mano y hasta el duvet se le estaba incendió. Comenzó a perder sangre.
Los argentinos iniciaron el repliegue. No habían advertido que dejaban en el campo a dos cabos heridos. Entonces, el soldado Clemente Bravo volvió sobre sus pasos. En medio del fuego enemigo, tomó a Pereyra y comenzó a subirlo. Alcanzó a llevarlo unos metros, cuando se percataron que tenían a los ingleses demasiado cerca.
El inglés precisó que “vi por el rabillo del ojo a dos soldados argentinos desplomados contra la pared de la trinchera a solo un metro de distancia con las manos en alto. Tomé mi fusil y me lancé al suelo, apunté con mi arma hacia ellos, con el dedo en el gatillo y comencé a gritarles que no se movieran”.
“Después de un par de minutos de un completo pandemonio, recuperamos el control de nosotros mismos y avanzamos para buscar a los dos soldados; descubrimos que ambos estaban heridos, llamamos al médico que vino rápidamente”.
Revisaron a los heridos. Les quitan el correaje, la pistola reglamentaria. Y el casco.
“Quedé desprotegido sin el casco”, remarcó Pereyra. Alguien de sanidad inglés, no sabe si fue un médico o un enfermero le cortó la hemorragia, y lo dejaron junto a otro herido bajo custodia de dos británicos. Uno de ellos era el propio Andy Damstag. Era de noche y había comenzado a nevar.
Como se seguía combatiendo y continuaba disparando la artillería argentina, el propio Damstag arrastró a Pereyra hasta detrás de una roca grande para protegerlo y le dio su casco, que lo llevaba enganchado en su correaje. Ese día los británicos pelearon con sus boinas verdes para reconocerse entre ellos.
“Con mucho esfuerzo, comenzamos a hablar –cuenta hoy Andy-. Dialogamos sobre la guerra, de fútbol y la familia, mientras fumábamos e intercambiábamos dulces por cigarrillos y compartíamos agua de nuestras cantimploras”.
El soldado inglés quiso llevarse un recuerdo. Tomó el caso del argentino y lo enganchó en su correaje.
Fue en ese momento en que se produjo una gran explosión proveniente de la artillería argentina, y soldados de ambos bandos se zambulleron al piso. Andy quedó debajo de un grupo de argentinos. Una intensa lluvia de tierra y metralla los cubrió.
Dos horas más tarde, el combate había finalizado y los ingleses bajaban de la cima del cerro con más argentinos prisioneros. Se improvisaron camillas. En una de ellas, colocaron a Pereyra quien, antes que se lo llevaran, se quitó el casco y se lo devolvió a su dueño. Damstag acotó que “cuando nos despedimos, nos dimos la mano, fue un momento emocionante”.
Nunca más se verían.
La vida continuó
Pereyra fue trasladado a un hospital de campaña en Fitz Roy y de ahí a Darwin, donde le extrajeron una esquirla. Finalmente, en el buque Uganda lo operaron de la doble fractura. Junto con otros 200 heridos, fue trasbordado al Bahía Paraíso.
En 1985 Pereyra, que había nacido en San Isidro y se había criado en Pilar, se casó y formó una familia en Gualeguaychú. Cuatro hijos –dos varones y dos mujeres- y ocho nietos. “Llevo una vida tranquila, con una gran compañera”, afirma.
Hace un par de años se retiró como Suboficial Principal Enfermero y además de la jubilación, cobra la pensión de veterano de guerra. Su esposa aporta a la economía familiar con un negocio de artículos de librería.
Mate en mano, le cuenta a Infobae: "No soy un activo malvinero; fui convocado para la guerra, y era mi obligación hacerlo”.
El llamado
Pero esos sentimientos le dieron un vuelco la noche del domingo 1 de septiembre pasado, cuando recibió el siguiente Whatsapp:
“Hola, Héctor, mi nombre es Andy cuando era un joven Royal Marine, te conocí a ti y a tu amigo durante la batalla del Monte Harriet en las Malvinas, si recuerdas, intercambiamos cascos (porque quería un recuerdo de nuestra reunión) cuando vinieron a despegar la montaña, me devolviste el casco, ahora me gustaría devolverte el casco. Un amigo mío dice que son valiosos para los coleccionistas, pero te lo presté hace treinta y siete años. Así que ahora quiero que lo recuperes”.
Acompañaba el mensaje con una fotografía del casco.
Inmediatamente, Héctor le respondió:
“Gracias por contactarme, amigo. Estoy muy feliz de verte lucir bien, han pasado más de treinta y siete años desde la última vez que nos vimos y me alegra poder hablar como amigos (a pesar de que hablamos diferentes idiomas), por favor manténgase en contacto, así puede devolverme el casco que me dejaste la primera noche que nos conocimos… es increíble verte y hablar contigo”.
Se contaron de sus vidas como viejos camaradas, de los años de servicio y de estos años en que eligieron la calma y la paz. “Bendito sea Dios que me permitió encontrarte y tenerte como amigo. Serviste bien a tu país y ahora merecés una vida pacífica”, cerró Andy. Y hubo lágrimas de los dos lados les océano.
“El casco vuelve a casa”
Durante los años que Damstag sirvió en el ejército en distintos puntos del mundo, llevó consigo el casco argentino. Le confiesa a Infobae una duda que lo persiguió durante casi cuatro décadas: “Durante años me pregunté que habrá sido de aquel joven soldado, si había sobrevivido, si tenía familia, qué había sido de su vida... y un montón de interrogantes que creía nunca tendría respuestas”.
Damstag dejó el ejército y hace años trabaja en el departamento de reciclaje en el ayuntamiento de Bolton, la ciudad donde nació, en el noroeste de Gran Bretaña. Con su esposa Liz tuvieron tres hijos –dos varones y una mujer- y ya es abuelo de cuatro nietos.
La historia que Héctor desconocía es que Marta Ransanz, que se define como “malvinera por pasión” es una abuela, ya viuda, que abrazó la causa de Malvinas y despliega una vasta actividad en redes sociales. Un inglés, Rick Strange, amigo de Andy, le pidió que lo ayudase a ubicar a un tal Pereyra. Ella pudo conseguir los datos para que ambos veteranos se contactasen. “Es un trabajo que tengo orgullo de llevar adelante”, aclaró sobre su pasión por Malvinas.
Finalmente, el día llegó. Damstag, acompañado por su esposa Liz, concurrió a la embajada argentina en Londres. “Fui atendido por Adrián Vernis y el capitán Moretto y en un sencillo acto devolví el casco. Fue un momento emocionante”, recordó.
Antes de despedirse de aquella pieza de guerra, que fue trofeo y amuleto, Andy besó el casco. Y sorprendió a los funcionarios argentinos. El marine lo explica así: “Cuando llegó el momento de irme, besé el casco por última vez porque sabía que era la última vez que lo vería, lo había atesorado durante treinta y siete años, pero ahora finalmente se iba a casa”.
Héctor ya tiene planes para cuando en los próximos días se lo entreguen. Lo colocará en una suerte de pecera de vidrio, junto con su chapa de identificación, para que todos puedan apreciarlo: “La guerra fue horrible, pero es bueno que se conozcan estas cosas”.
(Fuente: Adrián Pignatelli / Infobae)
Parapetado en una de las rocas estaba el cabo enfermero Héctor Pereyra, de 18 años. Unos meses antes el joven cursaba en la Escuela de Suboficiales General Lemos los estudios de su especialidad. Una vez conocida la recuperación de las islas, el 2 de abril de 1982, le dieron las jinetas de cabo y lo asignaron a la Compañía Comando y Servicio perteneciente a la III Brigada de Infantería. El 25 de abril ya estaba en Malvinas.
Durante cinco días, permaneció junto a su unidad en el aeropuerto. Luego, hasta el 11 de mayo, ocupó posiciones en un viejo puerto. Los tremendos bombardeos que los ingleses efectuaron el 1 de mayo, lo enfrentó por primera vez a la sangre que se derrama en una guerra: tuvo que asistir a sus compañeros heridos.
Hoy, 37 años después y desde Gualeguaychú, donde reside, Héctor recuerda aquellos días frente a Infobae: “El 11 de mayo dividieron a la compañía en dos: una parte iría a Puerto Howard y la otra a Monte Kent".
Las batallas ya eran cruentas, y luego de la caída de Pradera del Ganso, Pereyra revela que "quedamos un poco solos, ya que todos se replegaban en dirección a Puerto Argentino. Nosotros lo hicimos hacia Monte Harriet”.
Y es donde comenzó esta historia.
Ataque al Monte Harriet
El 12 de junio, Monte Harriet era un verdadero infierno. Los ingleses avanzaban en el terreno escarpado de la ladera, tenazmente defendida por los argentinos. En una de las trincheras, se encontraba Héctor Pereyra.
Uno de los británicos que participaba del ataque era Andy Damstag. “Encontramos una feroz resistencia de las posiciones argentinas; sus ametralladoras de 50 mm no dejaban de disparar con mucha puntería. Nuestro avance se vio obstaculizado aún más por el fuego de armas de menor calibre”, relata a Infobae desde su casa en Bolton, Reino Unido.
Damstag, con sus 18 años, se había enlistado en los Royal Marines ni bien terminó sus estudios secundarios, a los 16. Fue a la guerra como uno de los miembros del equipo de armas anti tanque. Integraba la Compañía Lima de los 42º Commando de los Royals Marines. Sólo tenía una vaga idea de dónde quedaban las islas, y cuando desembarcó el paisaje le hizo recordar a Dartmoor, una localidad en Devon, donde su unidad tenía su base y dónde se había entrenado.
A dos horas de iniciada la batalla, las secciones de avanzada británicas estaban inmovilizadas a pocos metros de las trincheras argentinas. Damstag remarca que “estábamos lo suficientemente cerca como para que ambos bandos pudiésemos lanzar granadas”.
Los británicos decidieron neutralizar la resistencia argentina disparando un proyectil anti tanque contra las trincheras que tenían enfrente, a escasos 30 metros.
Un explosivo cayó en la posición que Pereyra ocupaba con el cabo Carlos López. Pereyra fue gravemente herido: fractura de tibia y peroné, heridas en la mano y hasta el duvet se le estaba incendió. Comenzó a perder sangre.
Los argentinos iniciaron el repliegue. No habían advertido que dejaban en el campo a dos cabos heridos. Entonces, el soldado Clemente Bravo volvió sobre sus pasos. En medio del fuego enemigo, tomó a Pereyra y comenzó a subirlo. Alcanzó a llevarlo unos metros, cuando se percataron que tenían a los ingleses demasiado cerca.
El inglés precisó que “vi por el rabillo del ojo a dos soldados argentinos desplomados contra la pared de la trinchera a solo un metro de distancia con las manos en alto. Tomé mi fusil y me lancé al suelo, apunté con mi arma hacia ellos, con el dedo en el gatillo y comencé a gritarles que no se movieran”.
“Después de un par de minutos de un completo pandemonio, recuperamos el control de nosotros mismos y avanzamos para buscar a los dos soldados; descubrimos que ambos estaban heridos, llamamos al médico que vino rápidamente”.
Revisaron a los heridos. Les quitan el correaje, la pistola reglamentaria. Y el casco.
“Quedé desprotegido sin el casco”, remarcó Pereyra. Alguien de sanidad inglés, no sabe si fue un médico o un enfermero le cortó la hemorragia, y lo dejaron junto a otro herido bajo custodia de dos británicos. Uno de ellos era el propio Andy Damstag. Era de noche y había comenzado a nevar.
Como se seguía combatiendo y continuaba disparando la artillería argentina, el propio Damstag arrastró a Pereyra hasta detrás de una roca grande para protegerlo y le dio su casco, que lo llevaba enganchado en su correaje. Ese día los británicos pelearon con sus boinas verdes para reconocerse entre ellos.
“Con mucho esfuerzo, comenzamos a hablar –cuenta hoy Andy-. Dialogamos sobre la guerra, de fútbol y la familia, mientras fumábamos e intercambiábamos dulces por cigarrillos y compartíamos agua de nuestras cantimploras”.
El soldado inglés quiso llevarse un recuerdo. Tomó el caso del argentino y lo enganchó en su correaje.
Fue en ese momento en que se produjo una gran explosión proveniente de la artillería argentina, y soldados de ambos bandos se zambulleron al piso. Andy quedó debajo de un grupo de argentinos. Una intensa lluvia de tierra y metralla los cubrió.
Dos horas más tarde, el combate había finalizado y los ingleses bajaban de la cima del cerro con más argentinos prisioneros. Se improvisaron camillas. En una de ellas, colocaron a Pereyra quien, antes que se lo llevaran, se quitó el casco y se lo devolvió a su dueño. Damstag acotó que “cuando nos despedimos, nos dimos la mano, fue un momento emocionante”.
Nunca más se verían.
La vida continuó
Pereyra fue trasladado a un hospital de campaña en Fitz Roy y de ahí a Darwin, donde le extrajeron una esquirla. Finalmente, en el buque Uganda lo operaron de la doble fractura. Junto con otros 200 heridos, fue trasbordado al Bahía Paraíso.
En 1985 Pereyra, que había nacido en San Isidro y se había criado en Pilar, se casó y formó una familia en Gualeguaychú. Cuatro hijos –dos varones y dos mujeres- y ocho nietos. “Llevo una vida tranquila, con una gran compañera”, afirma.
Hace un par de años se retiró como Suboficial Principal Enfermero y además de la jubilación, cobra la pensión de veterano de guerra. Su esposa aporta a la economía familiar con un negocio de artículos de librería.
Mate en mano, le cuenta a Infobae: "No soy un activo malvinero; fui convocado para la guerra, y era mi obligación hacerlo”.
El llamado
Pero esos sentimientos le dieron un vuelco la noche del domingo 1 de septiembre pasado, cuando recibió el siguiente Whatsapp:
“Hola, Héctor, mi nombre es Andy cuando era un joven Royal Marine, te conocí a ti y a tu amigo durante la batalla del Monte Harriet en las Malvinas, si recuerdas, intercambiamos cascos (porque quería un recuerdo de nuestra reunión) cuando vinieron a despegar la montaña, me devolviste el casco, ahora me gustaría devolverte el casco. Un amigo mío dice que son valiosos para los coleccionistas, pero te lo presté hace treinta y siete años. Así que ahora quiero que lo recuperes”.
Acompañaba el mensaje con una fotografía del casco.
Inmediatamente, Héctor le respondió:
“Gracias por contactarme, amigo. Estoy muy feliz de verte lucir bien, han pasado más de treinta y siete años desde la última vez que nos vimos y me alegra poder hablar como amigos (a pesar de que hablamos diferentes idiomas), por favor manténgase en contacto, así puede devolverme el casco que me dejaste la primera noche que nos conocimos… es increíble verte y hablar contigo”.
Se contaron de sus vidas como viejos camaradas, de los años de servicio y de estos años en que eligieron la calma y la paz. “Bendito sea Dios que me permitió encontrarte y tenerte como amigo. Serviste bien a tu país y ahora merecés una vida pacífica”, cerró Andy. Y hubo lágrimas de los dos lados les océano.
“El casco vuelve a casa”
Durante los años que Damstag sirvió en el ejército en distintos puntos del mundo, llevó consigo el casco argentino. Le confiesa a Infobae una duda que lo persiguió durante casi cuatro décadas: “Durante años me pregunté que habrá sido de aquel joven soldado, si había sobrevivido, si tenía familia, qué había sido de su vida... y un montón de interrogantes que creía nunca tendría respuestas”.
Damstag dejó el ejército y hace años trabaja en el departamento de reciclaje en el ayuntamiento de Bolton, la ciudad donde nació, en el noroeste de Gran Bretaña. Con su esposa Liz tuvieron tres hijos –dos varones y una mujer- y ya es abuelo de cuatro nietos.
La historia que Héctor desconocía es que Marta Ransanz, que se define como “malvinera por pasión” es una abuela, ya viuda, que abrazó la causa de Malvinas y despliega una vasta actividad en redes sociales. Un inglés, Rick Strange, amigo de Andy, le pidió que lo ayudase a ubicar a un tal Pereyra. Ella pudo conseguir los datos para que ambos veteranos se contactasen. “Es un trabajo que tengo orgullo de llevar adelante”, aclaró sobre su pasión por Malvinas.
Finalmente, el día llegó. Damstag, acompañado por su esposa Liz, concurrió a la embajada argentina en Londres. “Fui atendido por Adrián Vernis y el capitán Moretto y en un sencillo acto devolví el casco. Fue un momento emocionante”, recordó.
Antes de despedirse de aquella pieza de guerra, que fue trofeo y amuleto, Andy besó el casco. Y sorprendió a los funcionarios argentinos. El marine lo explica así: “Cuando llegó el momento de irme, besé el casco por última vez porque sabía que era la última vez que lo vería, lo había atesorado durante treinta y siete años, pero ahora finalmente se iba a casa”.
Héctor ya tiene planes para cuando en los próximos días se lo entreguen. Lo colocará en una suerte de pecera de vidrio, junto con su chapa de identificación, para que todos puedan apreciarlo: “La guerra fue horrible, pero es bueno que se conozcan estas cosas”.
(Fuente: Adrián Pignatelli / Infobae)
viernes, 4 de octubre de 2019
CASTRACIÓN Y VACUNACIÓN GRATUITA DE MASCOTAS EN OCTUBRE
El puesto móvil de Zoonosis del Municipio de San Isidro sigue recorriendo el distrito para castrar o vacunar en forma gratuita a felinos y caninos; en el horario de 9 a 13. (Ver Dónde).
Este servicio también está disponible todos los días (CON TURNO PREVIO) en la sede central de Zoonosis, ubicada en 3 de Febrero 536, de 8:00 a 17:00. Para mayor información comunicarse al 4512-3151. Vía mail: zoonosis@sanisidro.gov.ar.
“El objetivo es concientizar a los dueños de las mascotas que la castración es el método más adecuado de control para evitar el nacimiento de crías que después son abandonadas. También previene en los animales enfermedades del aparato reproductor”, explicó Pablo Hernández, director de Zoonosis.
PARA TENER EN CUENTA:
Los interesados deben concurrir con una sábana limpia de aproximadamente 60 por 60 centímetros y una frazada.
El animal deberá tener 12 horas de ayuno sólido y líquido, y NO deben suministrarle medicamentos antes de la cirugía.
DÓNDE
- Sábado 5 – Plaza 9 de Julio de Martínez (Larumbe 762)
- Lunes 7 – Santa Rita, Boulogne (Yerbal 470) / CAPS San Isidro Labrador (Av. Rolón y Tomkinson)
- Martes 8 – Barrio Jardín, Boulogne (Montevideo y Uruguay) / Polideportivo Bajo Boulogne (Junín y Rivadavia)
- Miércoles 9 – Barrio Ombú, Villa Adelina (Novaro y Los Ceibos) / CAPS Bajo San Isidro (C. Rosales 1196)
- Jueves 10 – Plaza San Martín, Boulogne (Bogado e Independencia) / CAPS Beccar (Bergallo y Udaondo)
- Viernes 11 – Santa Rita, Boulogne (Yerbal 470) / Polideportivo Bajo Boulogne (Junín y Rivadavia)
- Martes 15 – Polideportivo Bajo Boulogne (Junín y Rivadavia). / Barrio Jardín, Boulogne (Montevideo y Uruguay)
- Miércoles 16 – Plaza Stella Maris, Villa Adelina (J.M. Moreno y Colombres) / CAPS Bajo San Isidro (C. Rosales 1196)
- Jueves 17 – Hipódromo San Isidro (Av. Márquez y Teller) / CAPS Beccar (Bergallo y Udaondo)
- Viernes 18 – Udaondo y Neuquén / Santa Rita, Boulogne (Yerbal 470)
- Sábado 19 – Paseo de los Inmigrantes, Villa Adelina (Piedrabuena y Ucrania)
- Lunes 21 – Santa Rita, Boulogne (Yerbal 470) / CAPS San Isidro Labrador (Av. Rolón y Tomkinson)
- Martes 22 – Barrio Jardín, Boulogne (Montevideo y Uruguay) / Polideportivo Bajo Boulogne (Junín y Rivadavia)
- Miércoles 23 – Centro de jubilados Volver a Empezar en Villa Adelina (Av. Ader 1149) / CAPS Bajo San Isidro (C. Rosales 1196)
- Jueves 24 – Delegación Barrio San Isidro (Panamericana y Camino Morón) / CAPS Beccar (Bergallo y Udaondo)
- Viernes 25 – Santa Rita, Boulogne (Yerbal 470) / Polideportivo Bajo Boulogne (Junín y Rivadavia)
- Sábado 26 – Centro Cívico Beccar (Av. Centenario 1900)
- Lunes 28 – Santa Rita, Boulogne (Yerbal 470) / CAPS San Isidro Labrador (Av. Rolón y Tomkinson)
- Martes 29- Manuela García 1565, Beccar) / Barrio Jardín, Boulogne (Montevideo y Uruguay)
- Miércoles 30- Plaza Belgrano en Villa Adelina (La Calandria y Dean Funes) / CAPS Bajo San Isidro (C. Rosales 1196)
- Jueves 31- Barrio Angelita en San Isidro (Tomkinson 900) / CAPS Beccar (Bergallo y Udaondo)
Este servicio también está disponible todos los días (CON TURNO PREVIO) en la sede central de Zoonosis, ubicada en 3 de Febrero 536, de 8:00 a 17:00. Para mayor información comunicarse al 4512-3151. Vía mail: zoonosis@sanisidro.gov.ar.
“El objetivo es concientizar a los dueños de las mascotas que la castración es el método más adecuado de control para evitar el nacimiento de crías que después son abandonadas. También previene en los animales enfermedades del aparato reproductor”, explicó Pablo Hernández, director de Zoonosis.
PARA TENER EN CUENTA:
Los interesados deben concurrir con una sábana limpia de aproximadamente 60 por 60 centímetros y una frazada.
El animal deberá tener 12 horas de ayuno sólido y líquido, y NO deben suministrarle medicamentos antes de la cirugía.
DÓNDE
- Sábado 5 – Plaza 9 de Julio de Martínez (Larumbe 762)
- Lunes 7 – Santa Rita, Boulogne (Yerbal 470) / CAPS San Isidro Labrador (Av. Rolón y Tomkinson)
- Martes 8 – Barrio Jardín, Boulogne (Montevideo y Uruguay) / Polideportivo Bajo Boulogne (Junín y Rivadavia)
- Miércoles 9 – Barrio Ombú, Villa Adelina (Novaro y Los Ceibos) / CAPS Bajo San Isidro (C. Rosales 1196)
- Jueves 10 – Plaza San Martín, Boulogne (Bogado e Independencia) / CAPS Beccar (Bergallo y Udaondo)
- Viernes 11 – Santa Rita, Boulogne (Yerbal 470) / Polideportivo Bajo Boulogne (Junín y Rivadavia)
- Martes 15 – Polideportivo Bajo Boulogne (Junín y Rivadavia). / Barrio Jardín, Boulogne (Montevideo y Uruguay)
- Miércoles 16 – Plaza Stella Maris, Villa Adelina (J.M. Moreno y Colombres) / CAPS Bajo San Isidro (C. Rosales 1196)
- Jueves 17 – Hipódromo San Isidro (Av. Márquez y Teller) / CAPS Beccar (Bergallo y Udaondo)
- Viernes 18 – Udaondo y Neuquén / Santa Rita, Boulogne (Yerbal 470)
- Sábado 19 – Paseo de los Inmigrantes, Villa Adelina (Piedrabuena y Ucrania)
- Lunes 21 – Santa Rita, Boulogne (Yerbal 470) / CAPS San Isidro Labrador (Av. Rolón y Tomkinson)
- Martes 22 – Barrio Jardín, Boulogne (Montevideo y Uruguay) / Polideportivo Bajo Boulogne (Junín y Rivadavia)
- Miércoles 23 – Centro de jubilados Volver a Empezar en Villa Adelina (Av. Ader 1149) / CAPS Bajo San Isidro (C. Rosales 1196)
- Jueves 24 – Delegación Barrio San Isidro (Panamericana y Camino Morón) / CAPS Beccar (Bergallo y Udaondo)
- Viernes 25 – Santa Rita, Boulogne (Yerbal 470) / Polideportivo Bajo Boulogne (Junín y Rivadavia)
- Sábado 26 – Centro Cívico Beccar (Av. Centenario 1900)
- Lunes 28 – Santa Rita, Boulogne (Yerbal 470) / CAPS San Isidro Labrador (Av. Rolón y Tomkinson)
- Martes 29- Manuela García 1565, Beccar) / Barrio Jardín, Boulogne (Montevideo y Uruguay)
- Miércoles 30- Plaza Belgrano en Villa Adelina (La Calandria y Dean Funes) / CAPS Bajo San Isidro (C. Rosales 1196)
- Jueves 31- Barrio Angelita en San Isidro (Tomkinson 900) / CAPS Beccar (Bergallo y Udaondo)