Comenzó la capacitación de mediadores para la Justicia Juvenil Restaurativa

El programa Justicia Juvenil Restaurativa sigue avanzando en San Isidro. La semana pasada comenzó, en el Colegio de Abogados local, la capacitación de los mediadores que intervendrán en este modelo de abordaje centrado en la prevención y en la reparación de delitos cometidos por jóvenes.
A lo largo de esta etapa, 20 alumnos que fueron preseleccionados por la Municipalidad, el Obispado y la Fiscalía General, abordarán temas como la delincuencia juvenil, la violencia en la adolescencia y nuevos tipos de delitos que aparecieron con el avance de la tecnología.
“Los mediadores ayudarán a llevar adelante la relación víctima- victimario y reinsertarán al joven que delinquió en el camino del estudio y del trabajo”, manifestó el intendente Gustavo Posse. Y agregó: “Este programa significa la oportunidad de que los chicos no sean institucionalizados sino que, luego del arrepentimiento de cometer un delito, vuelvan a formar parte de la sociedad”.
La Justicia Juvenil Restaurativa busca abordar y solucionar el delito juvenil desde una nueva perspectiva. Apunta al tratamiento de infracciones no graves y contravenciones cometidos por jóvenes o menores, basándose en tres pilares: responsabilidad del autor (toma de conciencia del daño provocado); reparación a la víctima (sanción); y reinserción del infractor a la comunidad (prevención de futuros delitos).
Gustavo Capponi, coordinador del proyecto en el departamento judicial de San Isidro, en representación del Colegio de Abogados, expresó: “Este primer semestre se capacita a los operadores de conflicto. Luego, comenzará un trabajo entre el Municipio y la fiscalía para evaluar los casos a intervenir y comenzar con las experiencias prácticas”.
El curso es dictado por la especialista española Raquel Rodríguez Silva, máster en Mediación y Sociedad Inclusiva: Gestión y transformación del conflicto por la Universidad de Barcelona. “Para que un adolescente tenga una buena adultez son necesarios cuatro pilares básicos: una comunidad social fuerte, una familia, un buen grupo de iguales y la educación. En eso profundizaremos”, explicó Silva.
Dentro del programa, que desde su implementación en Cataluña ha logrado bajar la reincidencia en el delito de los jóvenes que participaron de la experiencia en un 60 por ciento, se trabajará también con la familia del menor a quien se le ayudará a finalizar la escuela, practicar deportes, capacitarse en oficios, y recibir atención por parte de psicólogos y trabajadores sociales.
“Intentamos que no se sigan generando delincuentes. Buscamos una comunidad que sea nombrada como tal, común unidad”, concluyó el secretario de Integración Comunitaria, Arturo Flier.