Kayak en las colonias municipales de verano

Los jóvenes, de 13 a 17 años, inscriptos en las colonias municipales de verano aprenden diaria y gratuitamente actividades de kayak en el club Náutico Ciudad de San Isidro, gracias a un convenio que se llevó a cabo en conjunto con el Municipio.
“Tenemos profesores experimentados que enseñan a los chicos, sin peligro alguno, esta actividad tan divertida. Acá vivimos de frente, costado o espalda al río así que las clases son una excelente oportunidad para hacer una disciplina a la que no todos tienen acceso”, afirmó José Goyanes, Director General de Deportes y Administración del Municipio, y agregó que “lo más destacable es la integración, cooperación y solidaridad que se ve en los alumnos, al momento de estar en el agua”.
Las clases son progresivas y están complementadas, obligatoriamente, con lecciones de natación ya que los participantes no pueden entrar al río sin antes saber nadar. También se enseña a conocer las distintas partes del bote; los elementos de flotabilidad y seguridad; técnicas de remo; subir, bajar y dar vuelta una embarcación; y cómo desenvolverse en el agua. Siempre con un chaleco salvavidas puesto y acompañados por los profesores en una lancha de apoyo.
“Me parece muy bien que la Municipalidad incentive a los jóvenes a hacer actividades náuticas. Que vivencien lo que es un bote, remo y las maneras de usarlos. Todo en contacto pleno con la naturaleza”, sostuvo José González, uno de los profesores de kayak del club Náutico Ciudad de San Isidro que previamente fue alumno de las colonias y, por su experiencia en las mismas, decidió hacer el profesorado de educación física. “Acá aprendí a navegar, remar y hacer amigos, que son los que veo hasta el día de hoy, todos los fines de semana”, destacó.
“Vine porque me gusta remar y tener un buen estado físico”, contó Ezequiel González, de 13 años y vecino de Beccar. “Las clases están buenísimas porque nos enseñan muchísimas cosas que nos van a quedar para siempre. Por sobre todo, me gusta que nos integramos y ayudamos entre todos”, resaltó Sol Almada, de 15 años y oriunda de Villa Adelina.
“Los profesores tienen la mejor onda y te tratan con respeto. Al principio no quería venir pero me gustó tanto que voy a hacer el profesorado”, expresó Facundo Gularte, de 17 años.
“Les diría a todos los chicos que se animen a vivir esta experiencia inolvidable”, concluyó Goyanes.