“La campaña, que se viene desarrollando intensiva y diariamente desde abril de 2013, consiste en fumigar los espacios abiertos. Siempre aprovechando las primeras horas de la mañana y el crepúsculo, que son los momentos en donde mayor actividad de mosquitos hay”, afirmó Oscar Leo, responsable del Área de Control de Vectores, mientras supervisaba la fumigación en las inmediaciones de Puerto Libre (Sebastián Elcano 2340, Martínez). Y agregó: “Se adoptó un criterio para establecer zonas críticas, semi críticas y no críticas, resultado de los aparatos medidores que tenemos distribuidos a lo largo del distrito. Contamos con un índice casi inexistente del aedes así que el panorama es positivo y estamos muy conformes con la respuesta del vecino”.
“El balance del trabajo en 2013 fue muy satisfactorio. Hicimos mucho hincapié en las zonas de emergencia. También tratamos de concientizar a la gente de que, por ejemplo, tiren las botellas o baldes sin usar porque, de lo contrario, sirven como criadero”, explicó Mario Aragona, integrante del área de Control de Vectores, y destacó que la comunidad tiene que tener cuidado al viajar al exterior porque hay lugares donde se ven muchas especies transmisoras.
“Seguiremos armando estrategias para evitar picaduras. Si un vecino llega a tener algunos de los síntomas – como fiebre, mareo, dolor de cabeza y cuerpo, vómitos, entre otras cuestiones – tiene que concurrir a un hospital o centro médico para que se le hagan las pruebas y determine si es o no un caso de dengue”, concluyó Leo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario