El lugar elegido para la entrevista es un restorán cercano a CR, el coqueto balneario de Pinamar donde pasa sus vacaciones. Gustavo Posse llega puntual a la cita con Clarín, pero una pareja le cruza el camino y lo demora unos instantes. “Son vecinos de San Isidro, los conozco de cruzármelos todas las mañanas allá y no podía dejar de saludarlos”, se disculpa el intendente.
¿Cuánto lleva en el municipio?
Toda mi vida. Es mi casa. Imaginate que nací a dos cuadras de donde está mi despacho. Mi papá (el histórico intendente Melchor Posse) era médico y eso, en el barrio, era lo mismo que si fuera astronauta. Como intendente llevo 14 años y cada vez lo disfruto más.
¿Cómo es su rutina en verano?
Me instalé en Pinamar, como todos los años. Aprovecho para descansar un poco y recorrer la Costa. Y, cuando no pega el sol, me meto en el mar.
¿Hace deporte?
Hago mucho ejercicio. Corro y ando en bici. Me gusta mucho el deporte. De chico jugaba al tenis en River. Y hace unos años retomé el fútbol, juego de lateral y mi espejo es “El Pupi” Zanetti.
¿Iba a ver a River? ¿Usted no es de Boca?
Sí, soy de Boca y voy a la cancha. Pero, al igual que en la política, creo en la sana convivencia. Y de chico iba a la tribuna a ver a River.
Hay muchos políticos en Pinamar. Lo tiene a Massa cerca...
Sí, a Sergio me le meto de prepo en la carpa que alquila, je. A mí me gusta hacer sociales. Y esta etapa del año es un muy buen momento para crear vínculos. Conocer y entender al otro suma mucho, especialmente para resolver problemas durante el año.
¿Con los K también habla?
En Pinamar hay algunos. Si me los encuentro, trato de ser solidario porque en estos lugares, hoy el que es K está más aislado. Y uno tiene que entender que este ciclo ya se corta, pero que las personas que sirven van a seguir vigentes.
¿Entonces, rescata a algunos dirigentes oficialistas?
Por supuesto. Y tengo amistad con algunos, que son buenas personas. Eso sí: no te doy los nombres porque si no los crucifican.
Dijo que cree en la sana convivencia. Pero La Cámpora lo acusó de golpear militantes.
La Justicia está investigando el caso y yo soy respetuoso de ello. Lo que puedo decir es que hay tres dirigentes de La Cámpora que están procesados por haber herido a personal policial. Uno de ellos tiene herida gravísimas. Después, lo de Cristina acusándome es como un d
eja vú: va a ser un año con cadenas con impronta de contenido negativo.
¿Qué habla con Massa?
Somos amigos desde hace mucho. Y en lo político, desde antes de las elecciones, Sergio me estimuló para que me posicionara, para que trabajara para mostrar lo que hice en San Isidro y la construcción desde la diversidad que hicimos en el Frente Renovador. Me decía que yo a veces era demasiado manso y que tenía que acelerar. Y lo hice.
Varios nombres ya se anotaron como candidatos a la gobernación. ¿Usted qué dice?
Todavía no soy candidato porque estoy concentrado en la gestión. Eso lo decidiré dentro de un año. Pero la provincia no está bien y requiere que los que tenemos experiencia nos hagamos cargo. Es el momento de que un intendente llegue a ser gobernador, para que no se repita el problema de Daniel Scioli.
¿A qué se refiere?
Me refiero a un gobernador que cada vez gestiona peor y que es súbdito de Cristina para construir una carrera política. Para buscar un gobernador peor que Scioli hay que fijarse muy atrás en el tiempo.
¿Y qué opina de la ambición de Scioli de ser presidente?
Acá hay que pensar en la inseguridad, en la educación, en la economía, el transporte y en la inflación que le come el salario a los trabajadores. Yo no critico a quien haya lanzado su candidatura. Pero imponerla a cartelazos, no tiene sentido. (Fuente: Diario Clarín)
No hay comentarios:
Publicar un comentario