Impaglione, de 49 años, sufrió un corte en el brazo derecho y en la pierna derecha que le afectó la arteria femoral.
El hecho ocurrió anteayer a la madrugada en Julián Navarro 3264 y los delincuentes tendrían entre 16 y 18 años, según fuentes policiales.
Vecinos de Beccar y madres de los compañeros de colegio de los hijos de la víctima, mediante una cadena de correos electrónicos, buscaban ayer dadores de sangre.
Las personas interesadas en donar sangre lo pueden hacer en la Fundación Hematológica Sarmiento ( www.fuhesa.org.ar) , que tiene una sede en Echeverria 3176, en Olivos.
Impaglione no fue la única que resultó herida. Los delincuentes también atacaron a su esposo, Gerardo Soula, un ingeniero de 50 años, y su hijo mayor, Mateo, de 18.
Pero a diferencia de Impaglione, el ingeniero y su hijo fueron dados de alta después de que les curaran las heridas.
El hecho ocurrió cuando dos delincuentes sin armas aprovecharon que había un portón entreabierto e ingresaron por una persiana, que estaba rota.
Allí se apoderaron de unos 1000 pesos y 100 dólares, y varios objetos de valor que pretendieron llevar en el auto de la familia, tras exigirle al hijo del matrimonio que condujera.
En ese momento, el ingeniero y su esposa se habrían negado a que su hijo se fuera con los delincuentes y se trenzaron en lucha.
Según fuentes policiales, uno de los ladrones tomó un cuchillo tipo tramontina de la cocina y amenazó al hombre.
El ingeniero resultó herido en un brazo, al igual que su hijo, mientras que la esposa recibió una cuchillada en la ingle que le afectó la arteria femoral.
Los delincuentes escaparon y, al cierre de esta edición, no habían sido detenidos. El caso es investigado por el fiscal Patricio Ferrari. Hace dos semanas, vecinos de San Isidro habían marchado a los tribunales de San Isidro para exigir avances en las investigaciones por la inseguridad. /Fuente: Diario La Nación/
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