Se trata de un taller que enseña oficios a jóvenes y adultos con discapacidad mental leve y moderada. “Somos una entidad de bien público que funciona hace 30 años en San Isidro. Gustavo Posse nos apoyó desde nuestros inicios, al igual que su padre Melchor Posse”, comentó Gladis Saleño, integrante de la Comisión Directiva de APACIL, que alberga a 30 personas actualmente.
Posse resaltó que lo mejor que se puede hacer en materia de educación son estos talleres protegidos, “porque quienes sufren determinadas discapacidades, en su adultez pueden tener un lugar donde aprenden diferentes oficios”, dijo el intendente tras recorrer todos los cursos que allí se brindan. Contentos por su visita, los alumnos le obsequiaron objetos que habían fabricado.
La Terapeuta Ocupacional, Jezabel Sgro, habló sobre los talleres. “En el de gastronomía se elaboran prepizzas que luego se venden en los negocios de la zona; también se realizan artesanías en madera, cerámica, tazas y fuentes. Además hay un curso donde los alumnos hacen bolsas de residuo”.
Los segundos viernes de cada mes APACIL organiza una feria abierta a la comunidad en sus instalaciones.
Para mayor información comunicarse al 4763-4490
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