El Municipio de San Isidro diseñó un plan para modernizar los artefactos lumínicos en la vía pública; para ello reemplaza los existentes por otros con nuevas tecnologías y más durabilidad. El objetivo de este programa, que comenzó en Acassuso y Martínez, es mejorar la calidad de la iluminación sin aumentar el consumo de energía, cuidando el medio ambiente.
El subsecretario de Espacio Público, Federico Bereziuk, comentó que había un porcentaje ínfimo de luminarias con desperfectos y que generaban elevado consumo de energía. San Isidro cuenta con casi 35 mil artefactos lumínicos en todo el distrito. Y se estima –señaló el funcionario– que hay unos 3.000 artefactos antiguos en el Partido.
Por esa razón se inició un proceso de recambio de estos artefactos por otros de última generación “que brindan mejor distribución fotométrica y, con el mismo consumo, ofrecen mejor iluminación, algo que favorece la seguridad y visibilidad”.
La zona oeste del Partido, como Villa Adelina y Boulogne, ya tienen artefactos lumínicos modernos.
“Es un plan progresivo, por lo que en tres años apuntamos a tener todo el parque lumínico del Partido con artefactos de última generación”, adelantó Bereziuk.
¿Cuáles son las ventajas de la nueva luminaria?
Una mejora en la calidad lumínica nocturna con el mismo consumo que aportaba la vieja luminaria, que tenía una tulipa de vidrio que generaba una resistencia al paso de la luz. Estos nuevos artefactos poseen una tulipa de policarbonato con ópticas reflectivas en su interior, que brindan una mejor distribución fotométrica, es decir, que a la calle llegue mejor distribuida la intensidad de la iluminación.
Otra ventaja es que este tipo de iluminación requiere un menor mantenimiento. Por eso, Bereziuk aseguró que “por un par de años la nueva luminaria no sufrirá desperfectos, porque estos equipos tienen una larga durabilidad”.
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