Pasadas las 10, la ceremonia comenzó con la entonación de los himnos nacionales de Argentina y de Uruguay.
“Desde hace años mantenemos con los representantes de Uruguay una tradición muy fuerte de festejar con la comunidad de San Isidro el desembarco de los 33 libertadores. En el año 1964, durante el gobierno del intendente Juan Miguel Basso, tuvieron la magnífica idea de hacer este monumento para que no se pierda nunca la memoria de lo que hicieron estos hombres que arriesgaron su vida para liberar a su país”, indicó Posse.
El intendente subrayó que, junto con el embajador uruguayo, defienden la unión de los pueblos de ambos países. Y destacó la alianza del país vecino con el distrito. “En 1825, vecinos de San Isidro ayudaron y cobijaron a los 33 orientales las noches anteriores al desembarco. Es muy emotivo este acto para nosotros. La Virgen de los 33 Orientales, patrona de Uruguay, nació en esta costa sanisidrense”.
Posse contó que nació en la calle 33 Orientales, a pocas cuadras de la costa. “Pase parte de mi niñez pescando al lado del monumento”, agregó.
El embajador Pomi Barriola dijo: “Con este acto queremos transmitir la unión inexorable que existe entre los dos países. El presidente José Mujica ha sido un firme impulsor de la necesidad de integrar nuestras economías. Hay un mundo que se está organizando en grandes bloques y Sudamérica tiene que hacer un frente. Tenemos un rol muy importante de productores de alimentos, de materia prima, de minerales, de agua, de energía. Si estamos unidos vamos a poder llevar mejor nuestro rol”.
Después de los discursos, se depositaron en el monumento ofrendas florales.
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