"Promover la educación y la estimulación en los primeros años del niño/a es sembrar condiciones para la igualdad" aseguró el Presidente de la Comisión de Familia, Acción Social, Mujer, Adolescencia e Infancia quien a su vez explicó el esfuerzo que desde el municipio se desarrolla en las políticas integrales hacia la familia y la educación. “Trabajar en la estimulación temprana es el abc de la igualdad" subrayó el edil.
Álvarez afirmó que el intendente Gustavo Posse y el secretario del área, Gustavo Hirsch le han trasladado una visión integral de la política hacia la familia, y especialmente hacia la infancia, con un objetivo claro de llevar adelante políticas que promocionen la igualdad. Las iniciativas que se ponen en marcha apuntan en una misma dirección por diferentes caminos, "el combate a la deserción escolar, las acciones para profundizar los vínculos familiares o la creación de una oficina de asesoramiento a las familias aspirantes a la guarda en adopción, medida pionera entre los municipios argentinos, son rutas que conducen a una mismo lugar: lograr condiciones de igualdad desde el cumplimiento de los derechos del niño/a para construir una ciudad justa y más integrada". Seguramente será una de las señas de identidad de San Isidro, señaló.
Precisamente ante este desafío de una sociedad más justa y más integrada, el concejal radical lamentó que los 8 años de gobierno kirchnerista, beneficiados de un crecimiento económico espectacular para la Argentina, no hayan servido para mejorar la vida de los argentinos sosteniendo que "este es un gobierno incapaz que no ha sabido aprovechar las condiciones inéditas que ha tenido nuestro país para modificar la matriz energética, renovar sus infraestructuras viales y habitacionales o renovar la estructura económica. Son cosas que no se han hecho y es una oportunidad perdida". "Están tirando a la basura el crecimiento de la Argentina" sentenció.
Afirmando que se trata del despilfarro de una de las mayores fases de desarrollo del país, Álvarez reflexionó sobre el papel de “insignificancia estratégica” que ocupa el radicalismo en el mapa de la oposición. “La dirigencia del radicalismo está fuera de época” subrayó. “Los partidos políticos son un medio para lograr la concreción de ideales superiores, una herramienta para llevar adelante una transformación. Esta dirigencia agotada mira al partido radical como un fin en sí mismo. Si se convierte en un fin en sí mismo, la dirigencia vive para conducir el partido y no para cambiar la realidad”. El político radical hizo hincapié en la necesidad de una agenda política para el futuro con dirigentes capacitados para ello. “Necesitamos pensar los temas que nos instalan en el futuro y no veo dirigentes del radicalismo en ese trabajo, hay que renovar con ideas a la política argentina” concluyó.
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