Con gran concurrencia de público. se realizó en el salón de actos de la Asociación Raíces Abruzzesas en la Argentina, ubicado en Neuquén 1170, el encuentro denominado “Bodas de Oro de los Inmigrantes de San Isidro”, una ceremonia en la que se rindió homenaje a aquellos extranjeros que eligieron San Isidro para vivir, más concretamente a los que han cumplido 50 años o más en su patria chica adoptiva.
El encuentro, que fue la etapa final de un complejo trabajo elaborado por la Asociación Italiana de San Isidro, tuvo lugar ayer por la noche y contó con la presencia del intendente de San Isidro, doctor Gustavo Posse.
También asistieron el secretario de Desarrollo Social, Mario Alonso; la titular del Consejo Escolar, Norma Balmaceda; la directora General de Educación de la Comuna, María de los Angeles Broggi; y el vicepresidente del Concejo Deliberante, Andrés Rolón, entre otras autoridades.
La ceremonia comenzó con la entonación del Himno Nacional y luego el presidente de la Asociación Madonna del Pettoruto, Alejandro Di Giovanni pronunció las palabras de bienvenida.
En su discurso mencionó en qué zona del distrito se asentaron cada una de las colectividades. Así, sostuvo que los abruzzeses y calabreses se ubicaron en el centro y oeste del partido, los españoles en el centro comercial del partido, ucranianos y canarios en Villa Adelina, sardos en Punta Chica, libaneses en la periferia del distrito, sicilianos y hebreos en Martínez, y genoveses, piamonteses y vénetos en distintos puntos del partido. “Hoy los hijos, nietos y descendientes pueden sentirse orgullosos de la verdadera epopeya migratoria que realizaron sus abuelos”, subrayó Di Giovanni.
A continuación dirigieron su palabra tres representantes de colectividades extranjeras. En primer lugar lo hizo Pedro Pintus, en representación de la colectividad italiana. Dijo que “Todos los seres humanos tenemos un destino. Y a nosotros, los inmigrantes, el destino nos trajo a San Isidro. Aquí encontramos paz, trabajo y progreso”, expresó.
Por su parte, Alberto Arakaki, representante de la colectividad japonesa, dijo: “Mis padres vinieron de Japón en la década del ´30 y como ellos la mayoría no pudo volver nunca más a su país. Llegaron, trabajaron duro, formaron sus familias y progresaron. Recuerdo que cuando creamos nuestra asociación, en 1987, tuvimos un gran apoyo de Melchor Posse algo que ahora continúa con Gustavo Posse”, indicó Arakaki.
En tanto, Julio Affif, presidente de la Sociedad Libanesa de San Isidro, dijo que la corriente migratoria libanesa ocurrió en 1910. “En ese año vinieron entre otros mis abuelos, encontrando en San Isidro un fantástico lugar para desarrollarse. Cuando nos invitaron a participar de este acto, nos dijeron que nosotros no podíamos estar ausentes porque somos parte importante de la historia de San Isidro. Esto es algo muy emocionante”, señaló Affif.
Luego se dirigió a los presentes el intendente Posse. “Este año nos propusimos que haya un día de homenaje a los inmigrantes con más años en el partido para brindarles un justo reconocimiento. Todos provenimos de las distintas corrientes migratorias y tuvimos la suerte de que nuestros antepasados eligieran esta zona para arraigarse. Y es necesario destacar que San Isidro es fruto del esfuerzo de sus pioneros, pero también de los inmigrantes”, subrayó el jefe comunal.
“Los inmigrantes vinieron acá para trabajar, para formar sus familias, para progresar y para darles estudios a sus hijos para que sean mejores que ellos. Y muchos, la mayoría, lo lograron. Por eso queremos distinguir con un diploma a los inmigrantes más antiguos”, enfatizó el titular del Ejecutivo San Isidro, quien expresó su agrado respecto al proyecto de crear en alguno de los museos locales un espacio dedicado a los inmigrantes sanisidrenses.
Una vez terminadas sus palabras, el jefe comunal entregó una placa al presidente de la Asociación Italiana de San Isidro y organizador de este encuentro, Mario Calónico, por su compromiso social y dedicación a la comunidad.
La entrega de diplomas comenzó con Miriam Davidowics de Kessler, de Bélgica, y continuó con Ana María Kolles de Griefenstein, de Alemania.
Luego recibieron los diplomas los representantes de cada una de las entidades que nuclean a los inmigrantes distinguidos: Sociedad Sarda Zona Norte, Sociedad Japonesa de San Isidro, Familia Hebreos de San Isidro, Asociación Canaria de Villa Adelina, Sociedad Siciliana Zona Norte, Sociedad Calabresa de San Isidro, Sociedad Vicentinos Zona Norte, Sociedad Marchigianos Zona Norte, Inmaculada Concepción de Villa Adelina, Asociación Monterroso de San Isidro, Asociación Madonna del Pettoruto, Asociación Italiana de San Isidro y Asociación Raíces Abruzzesas.
Según los organizadores se realizará durante el año próximo una segunda entrega de diplomas a inmigrantes con 50 o más años en San Isidro.
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