El encuentro, que fue animado por el periodista Enrique “Quique” Wolff, tuvo lugar el viernes por la noche en el Gimnasio del Colegio Carmen Arriola de Marín y contó con la presencia de numerosos feligreses de esta parroquia, quienes de esta manera colaboraron para que la Casa Parroquial cuente con lo necesario para brindar un eficaz servicio.
La nueva Casa Parroquial está compuesta por dos plantas cuando la original tenía solo una, duplicándose así su capacidad y conservando su fachada y contrafrente que es lo que tiene real valor histórico.
El interior de la casa fue demolido. En la planta baja funciona todo lo que es servicio y en la planta alta, las actividades pastorales.
Entre otras áreas parroquiales funcionan en esta casa Cáritas, bolsa de trabajo, consulta laboral, banco de medicamentos para sectores carenciados, reparación y distribución de ropa, servicio de mediación, counceling, cursos de capacitación, alcohólicos anónimos, grupo de duelo, talleres y reuniones, entre otras actividades.
La Casa Parroquial es también el lugar natural para las reuniones de los 1000 jóvenes que participan en los grupos Confirmación, Caminar, Transpirar, Misión, Servicio y Primera Rueda, entre otros.
En esta sede se realizan también los encuentros de catequesis familiar, prebautismales, prematrimoniales, como así también cursos y charlas.
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