La ceremonia, realizada esta mañana en el frente del establecimiento educativo contó con la presencia de los secretarios comunales de Obras Públicas, Ing. Bernardo Landívar; de Desarrollo Social, Mario Alonso y de Servicios Públicos, Alberto Trípoli; la directora y subdirectora de Educación, María de los Ángeles Broggi y Marta Allaria; la presidenta del Consejo Escolar de San Isidro, Norma Balmaceda; la inspectora en jefe del Distrito de Gestión Estatal, profesora María Celia Feijoó, la inspectora Patricia Naso, concejales, docentes, directivos y personal, alumnos y miembros de la comunidad educativa del jardín de infantes.
En el año en que el establecimiento educativo del nivel inicial celebra su 30º aniversario al servicio de la comunidad, la flamante sede del Jardín tiene tres salitas, salón de usos múltiples, una sala para informática y otra para música, dirección, cocina, calefacción y aire acondicionado.
Cabe consignar que cada sala tiene su propias instalaciones sanitarias con acceso directo, por lo que los niños no deben ausentarse o salir a pasillos o patios para ir al baño, lo que facilita el control de los docentes.
El acto comenzó con la entrada de las banderas de ceremonia. El pabellón nacional tuvo de abanderada Kiara Silva y de escoltas a Gonzalo Buslemen y Juan Bautista Godoy, mientras que la bandera sanisidrense tuvo de abanderada a Sofía Cabaña y de escoltas a Agustina Viviani e Ignacio Díaz.
Luego, se entonaron las estrofas del Himno Nacional.
A continuación, se realizó el tradicional corte de cintas que dejó oficialmente inaugurado el nuevo edificio. Enseguida, el padre Enrique Alfonso bendijo las instalaciones.
Después del descubrimiento de una placa alusiva, llegaron los discursos.
“La realidad es que, desde antes que fuera intendente, siempre buscamos que este jardín estuviera en las mejores condiciones hasta que encontráramos un lugar definitivo”, declaró Posse.
“La historia dice que cuando un municipio quiere comprar algo, el precio sube y esa es la razón por la cual cada vez que quisimos comprar una propiedad no lo hicimos –contó el titular del ejecutivo sanisidrense. Y cuando dijimos que no a una compra alta fue porque defendemos el dinero de los vecinos. Y en este caso se dieron todas las condiciones y salió todo bien”, añadió.
“Cuando un pequeño cruza la puerta del jardín de infantes de la mano de su mamá o su papá, para un chico se abre una instancia que lo puede llevar hasta un lugar que no tiene techo”, subrayó el intendente.
“Lo más interesante de lo que hoy nos convoca no es solo la historia de este lugar, sino saber que continuará”, concluyó Posse.
“Hoy renovamos este vínculo tan fuerte que la comunidad tiene con este jardín y con un plantel que, desde el principio, fue tenaz, perseverante, trabajó con vocación y buscó siempre caminos distintos para poder brindar un mejor servicio educativo”, expresó emocionada la directora del Jardín Municipal Nº 7, Mónica Othasegui.
También agradeció al intendente Posse “por haber entendido que esto no era una necesidad personal de los docentes sino una necesidad de la comunidad toda y de los más pequeños”.
Por su parte, Naso dijo que “estamos sumamente orgullosos que este jardín estrene nueva sede, donde los chicos van a poder construir nuevos conocimientos con directivos y docentes que brindan más y mejor educación”.
El Sapo Pepe, Minnie y Mickey Mouse acompañaron con canciones a los pequeños en el cierre.
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